¡Qué lástima!
La otra noche viendo el Informativo de televisión pensaba sobre lo difícil que debe ser hacerse político.
En primer lugar hay que aprender a contestar las preguntas dando todos los rodeos posibles y desviando el tema hacia donde queremos. Si tu partido político ha hecho algo en Educación y te preguntan sobre Inmigración deberás responder: "La inmigración ordenada es muy positiva para el país y para el inmigrante, pero deberá empezarse por ofrecerle una Educación adecuada y eficaz, que será muy beneficiosa para él y sus familiares..."
También deberás aprender a no decir absolutamente nada en el mayor número de palabras posible. Si es en un mitin público mejor. "El ciudadano y la ciudadana es variopinto o variopinta, multicolor o multicolora en sus más estrictas manifestaciones psicosomáticas y pseudocomplejas". Y a medida que vas acabando la frase es crucial que vayas elevando el tono para arrancar multitud de aplausos. Claro, la gente que acude a esos actos aplaude lo que le echen y se tragan lo que les cuenten.
Vamos, que si el político en el mitin les dice: "Hoy me he lavado la cabeza, -va elevando el tono mientras levanta un dedo- y NO TENGO CASPA". Y la multitud se pone a aplaudir enfervorizada, como poseída. "SÍ, AMIGOS, NO TENGO CASPA". Clapclapclap... '¡Bravo! ¡Bravo!...
Es necesario también aprender a decir cosas absurdas y lo que es peor, creérselas: "Vamos a enviar al ejército en misión de paz". Pero eso quién se lo cree. Si quieres paz enviarás a las Hermanitas de la Caridad, no al ejército armado hasta los dientes. Vamos, digo yo.
Por supuesto, también hay que recitar cosas obvias en un tono muy solemne: "Para alcanzar la paz hay que abandonar la violencia..." Y el público entregado rompe en aplausos como si estuviera en la última gira de U2 y Bush se hubiera jubilado ayer por la tarde.
Pero o pera lo que me resulta más irritante o irritanta es esa manía o manío de hablarnos o hablarnas como si fuéramos tontos o tontas. ¿Es que no saben que cuando se dice ciudadanos o españoles o seres humanos o pajarillos del bosque o pececillos de colores... se refiere uno a todos sin excepción, sin distinción de géneros? Eso sí es igualdad, y no lo otro.
Si encima tienes que aprender inglés -ver el post de Mardevientos "Pliz, visit Itali", es genial-, no doy la talla para ser político. Mi coeficiente intelectual no es suficiente para la cosa.
En primer lugar hay que aprender a contestar las preguntas dando todos los rodeos posibles y desviando el tema hacia donde queremos. Si tu partido político ha hecho algo en Educación y te preguntan sobre Inmigración deberás responder: "La inmigración ordenada es muy positiva para el país y para el inmigrante, pero deberá empezarse por ofrecerle una Educación adecuada y eficaz, que será muy beneficiosa para él y sus familiares..."
También deberás aprender a no decir absolutamente nada en el mayor número de palabras posible. Si es en un mitin público mejor. "El ciudadano y la ciudadana es variopinto o variopinta, multicolor o multicolora en sus más estrictas manifestaciones psicosomáticas y pseudocomplejas". Y a medida que vas acabando la frase es crucial que vayas elevando el tono para arrancar multitud de aplausos. Claro, la gente que acude a esos actos aplaude lo que le echen y se tragan lo que les cuenten.
Vamos, que si el político en el mitin les dice: "Hoy me he lavado la cabeza, -va elevando el tono mientras levanta un dedo- y NO TENGO CASPA". Y la multitud se pone a aplaudir enfervorizada, como poseída. "SÍ, AMIGOS, NO TENGO CASPA". Clapclapclap... '¡Bravo! ¡Bravo!...
Es necesario también aprender a decir cosas absurdas y lo que es peor, creérselas: "Vamos a enviar al ejército en misión de paz". Pero eso quién se lo cree. Si quieres paz enviarás a las Hermanitas de la Caridad, no al ejército armado hasta los dientes. Vamos, digo yo.
Por supuesto, también hay que recitar cosas obvias en un tono muy solemne: "Para alcanzar la paz hay que abandonar la violencia..." Y el público entregado rompe en aplausos como si estuviera en la última gira de U2 y Bush se hubiera jubilado ayer por la tarde.
Pero o pera lo que me resulta más irritante o irritanta es esa manía o manío de hablarnos o hablarnas como si fuéramos tontos o tontas. ¿Es que no saben que cuando se dice ciudadanos o españoles o seres humanos o pajarillos del bosque o pececillos de colores... se refiere uno a todos sin excepción, sin distinción de géneros? Eso sí es igualdad, y no lo otro.
Si encima tienes que aprender inglés -ver el post de Mardevientos "Pliz, visit Itali", es genial-, no doy la talla para ser político. Mi coeficiente intelectual no es suficiente para la cosa.