¡Qué pereza!
Se llamaba Addwaitya y murió en Calcuta el otro día. Eso no tiene nada de especial, en Calcuta se muere gente todos los días, como en Madrid, Beirut o Pekín. Lo que sí me llama la atención es que murió a los 255 años de edad. Sí.
Nació una mañana clara de 1751. Seguro. Entonces no había contaminación ni efecto invernadero ni nada de eso. Nació cuando Mozart, vió la Revolución francesa, vivió dos guerras mundiales, la llegada del hombre a la luna, la Perestroika y la victoria ajustadísima del señor Bush en sus últimas elecciones. ¡Qué pereza!
La semana pasada, habiendo visto casi de todo, salió de su Casa y dijo ahí os quedáis, ya he tenido bastante.
7 comentarios:
Caray...¿No se llamaría Tortu-Matusalen? Que vida tan larga...Y un día cansada de todo, aburrida de nosotros y de tanto cambio dijo ya no quiero seguir...
Besos en tus ojos...
:oP
Bohe, ya estamos con los ojos. Uf, no me echo colirio ni para heredar. Ya sabes.
Otro besoso. Gordo.
Wow, 255, qué dicha. Sin embargo, pienso que ya estaría cansada de ver tanta discordia en este mundo. Saludos desde Puerto Rico, te tengo en mi lista de blogs.
Que impresionante la tortuguita eh? Supongo que ya estaría curada de espanto con la evolución de nuestro querido planeta y decidió ir al más allá, 255 son más que suficientes, si la tortuga hablara !!!
MAR: Gracias por leerme y molestarte en dejar un comentario.
¿Sabes? Lo mejor del blog son vuestros comments.
Sí, lo de la mezquindad mental y moral de algunos humanos debe cansar hasta a las tortugas.
ELI: sí, lo de la tortuguita es genial. Menos mal que no hablaba, porque llega a hacerlo y más de uno se cae de culo. -Uy, perdón, se me ha escapado.-
Oye, un besote enorme y gracias por tu comment.
Para bien nos ha dejado, no vera lo que nos espera pero como el q no conoce su historia esta condenado a repetirla, quien sabe lo que nos depare.
Saludos
Se cansó de todo ....
:) besitos dulces
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